Con el paso del tiempo cada vez
nos hacemos más viejos, y nuestra forma de caminar no es la misma cuando somos jóvenes
a cuando se llega a viejo, por ello cada persona posee unas características las
cuales se pueden identificar para saber cuántos años poseen.
Una de las principales características
es que cuando oscilamos entre los 20 años la mayoría de las personas no balancean demasiado los brazos de atrás hacia delante
cuando se camina.
En Tokio Japón unos
investigadores han creado un sistema de análisis de imagen capaz de determinar
la edad de una persona por su forma de andar. Un sistema el cual establece si
la forma de caminar de una persona corresponde con la de un individuo de edad
superior o inferior a la real, donde se construirá una fuente de información
objetiva que ayude a concientizar sobre la necesidad de mantenerse en forma.
Entre las personas con las
que se puede identificar su edad se observan sus patrones al caminar como la longitud
de la zancada, la oscilación de los brazos y la velocidad, así como la
musculatura de su espalda y tamaño de las cabezas.
Dentro de los datos que se pudieron
proporcionar llegaron a la conclusión que la gente que tiene alrededor de 20
años no hace balanceos casi de los brazos de atrás hacia delante, mientras que
las personas aún más mayores de 40 años tienden a cargar el peso en la espalda
cuando caminan.
Esta combinación con la tecnología
también puede ser utilizada no solo para identificar las edades de las personas
sino que también se podría emplear en la vigilancia.
La tecnología ha sido una vía
para identificación, pero también no es un dato exacto ya que todo depende de
nuestro comportamiento donde nosotros como personas cada día podemos ir
trabajando con nuestra persona y no dejarnos de descuidar.
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